Durante una conferencia de prensa convocada recientemente por la Asociación Médica de la Gran Bretaña, se informó que las llamadas cámaras bronceadoras, que broncean la piel de manera artificial, pueden causar cáncer cutáneo. Una encuesta realizada por el Departamento de Salud inglés demostró que el 25 por ciento de los jóvenes de entre dieciséis y veinticuatro años se broncea con la ayuda de estas cámaras. Según la doctora Margaret Price “ninguna cámara bronceadora es segura. Todas pueden causar cáncer y sin duda envejecen la piel. No hay un límite seguro” .
Por su parte, Katie Aston, de la Junta de Educación Sanitaria, está convencida de que se podrían evitar muchas muertes si la industria de la moda dejara de decirle a las mujeres que las piernas blancas no son atractivas. “También los hombres creen que la piel blanca es sinónimo de mala salud.” Los rayos que dañan la piel son los ultravioleta A (UVA) y los ultravioleta B (UVB). La mayoría de los cámaras bronceadoras emplea los UVA, considerados como menos riesgosos; sin embargo, los últimos experimentos demuestran que ambos son igualmente nocivos. Australia es el país donde se ha registrado el mayor número de casos de cáncer en a piel.
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