La mayoría de los plásticos no soporta la presión de las bebidas gaseosas, por lo que durante mucho tiempo, los fabricantes de botellas no salieron del vidrio. Entonces el ingeniero estadounidense Nathaniel Wyeth
descubrió una forma de utilizar el plástico PET para crear una botella más resistente. Sabiendo que las fibras sintéticas se fortalecen al estirarlas en la fabricación, diseñó una máquina que estiraba el PET en dos direcciones mientras lo amoldaba. El resultado, parentado en 1973, fue la botella plástica contra presión.
0 Comentarios