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| Coral de fuego |
Cada una de las especies marinas venenosas tiene un tipo específico de veneno que actúa de diferente manera. Estas son sus principales características:
El coral de fuego (Millepora species) se distribuye en todos los mares tropicales. Su veneno provoca irritación en la piel, con una sensación de aguijoneo semejante al que producen las plantas venenosas.
La medusa: (Physalia species) es conocida como "agua mala". La tetramina y 5 hidroxitriptamina son los venenos de esta habitante de los mares tropicales. Provocan dolor punzante inmediato e intenso, palpitaciones y sensación de ardor, salpullido inflamatorio, ampollas, shock, colapso y, en casos muy raros, puede causar la muerte.
La anémona marina (Actinia equina), que se encuentra en los mares Mediterraneo, Negro, etcétera, ocasiona quemaduras en la piel, sensación de aguijoneo, comezón, enrojecimiento, ulceración, náusea, vómito y postración.
Entre los moluscos, el cono (Conus species), que se halla en la región tropical del Indo Pacífico, tiene un veneno cuyo principio tóxico son los compuestos cuaternarios del amoniaco, produce decoloración del área afectada, cianosis del área circundante, entumecimiento, sensación de ardor, visión borrosa, pérdida del habla, dificultad para tragar, náusea, debilidad extrema, coma y muerte en algunos casos.
Entre los equinodermos, la estrella corona de espinas (Acantaster planci), que se encuentra en el Indo Pacífico, inyecta un veneno mediante la penetración de sus espinas que producen heridas muy dolorosas, enrojecimiento, sudoración, vómito, adormecimiento y parálisis.
La mantarraya (Dasyatis especies), que vive en los mares templados y caliente, posee un aguijón debajo de la cola con el cual pica inyectando un veneno cardiotóxico; produce heridas muy dolorosas que ocasionan la caída de la presión sanguínea, nausea, vómito y fallas cardíacas, parálisis muscular, aunque raramente la muerte.
El pez escorpión (Scorpaena species), que vive en los mares templados y tropicales. Las espinas producen heridas muy dolorosas que hacen que la víctima grite de dolor, seguido de enrojecimiento, sudoración, pérdida de conciencia, ulceración de la herida, parálisis, falla cardíaca, delirio, dificultad para respirar, convulsiones y muerte.
El pez piedra (Synanceja species), que vive en los mares de la región pacífica, produce una herida extremadamente dolorosa por medio de su aleta dorsal con síntomas semejantes a los del pez escorpión aunque más severos.
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